Málaga, 2 de octubre de 2007
“Toca baño”…
Eso ha dicho mi dueña esta mañana, me ha cogido y sin preguntar si me apetecía o no me ha bañado,
la verdad es que el agua calentita y eso relaja bastante, lo malo es el champú, que para mi gusto huele demasiado bien, pero los masajitos que me da mi dueña mientras me baña tampoco están del todo mal y desentumecen mis músculos.
Lo peor de todo es que después de bañarme… llega el secado, peinado y demás, que es ciertamente un incordio, pues tengo que estar mucho rato de pie,
y eso me hace tener una duda existencial de las gordas : “¿por qué no puede secarme en mi camita mientras estoy tumbada quedándome frita?
Aunque hay que reconocer que después se me queda un pelo, como para hacer un anuncio de champú…: “porque yo lo valgo”.
Ahora es de noche, y estoy apunto de irme a la camita como una buena perrita.
buenas noches a todos, perronautas (esto me suena de algo…)
miércoles, 10 de octubre de 2007
""hoy toca baño""
ese perro plasta....
Málaga, 1 de octubre de 2007
Hoy por la mañana cuando me han sacado a pasear,
mi dueña se ha encontrado con un perro que estaba sólo en la calle, ella lo ha empezado a llamar y a toquetear , a mi no me ha gustado ni un pelo,
ella sólo puede tocarme a mi, nada de acariciar perros extraños y menos aun querer llevárselos a casa, encima el perro ese nada mas que hacia olerme y perseguirme, en fin un plasta, menos mal que al final el muy tonto escapo de mi dueña.
""ese objeto cuadrado""
Málaga, 30 de septiembre de 2007
Hoy por la mañana a la hora del desayuno mis amos han desayunado en un lugar diferente al que lo hacen normalmente, en vez de ser el sitio ese donde guardan la comida y que definen con la palabra “cocina” , ha sido en el zona en la que ellos suelen reunirse para mirar el objeto cuadrado llamado televisor.
Después hemos ido a pasear por el parque,
donde también pasean mas perros acompañados por sus amos, como siempre todos tiene el empeño de olerme y sus amos igualmente el de tocarme,
como si yo fuera un peluche al que pueden manosear .
Después de almorzar hemos dormido un rato,
ellos en su guarida y yo como siempre en mi camita al lado de la puerta.
A la tarde hemos vuelto ha salir, y mi ama como ya es habitual me ha vuelto a peinar, y hacerme unas coletas en la cabeza, cada vez que va hacer eso yo salgo pitando pero ella siempre me coge.
